Autora: Carmen Serrano
El lunes 21 de abril de 2025 fue un día histórico, debido a que ocurrieron dos hechos que estremecieron al mundo, a nuestro país y a mi corazón.
Al despertar, lo primero que me enteré fue del fallecimiento del papa Francisco, nuestro “papa Panchito” como le decimos, mis amigos y yo, con cariño. Un líder mundial, de creyentes y no creyentes, que, aunque no tuvieras la suerte de conocer en persona, podías sentir su cercanía, humildad y alma justiciera en cada gesto y palabra pronunciada. Denominado por algunos como un papa “con alma amazónica” por su compromiso con la crisis socioambiental del mundo (Cárdenas y Torres, 2025).
Y el segundo acontecimiento me enteré ya por la tarde. Como un rayo de sol y esperanza llegó a mí la noticia de que Mari Luz Canaquiri Murayari, una valiente lideresa del pueblo indígena kukama kukamiria, presidenta de la organización Kukama “Huaynakana Kamatahuara Kana” (“mujeres valientes” en castellano) de Loreto, recibiría el “Premio Goldman 2025” (el “Nobel verde”) un reconocimiento a nivel mundial que honra el liderazgo de activistas ambientales.

Mi corazón estaba experimentando un encuentro de emociones importantes por cómo, una vez más, veía hechos tan trascendentes enlazarse entre fechas y horarios, de tal forma que llegas a la conclusión de que esto no es una casualidad.
Este suceso no solo significa que este bien natural podrá ser protegido con mayor énfasis de los efectos negativos causados por los derrames de petróleo, extracciones y otras actividades ilegales contra las cuales las lideresas llevan luchando por décadas, sino que también deja un precedente y, de acuerdo con Canaquiri, “puede girar la llave del cambio en la defensa por la Amazonía” (citada por Bayarte, 2025).
Mari Luz logró, mediante su lucha, junto a otras mujeres kukama, que el río Marañón, un ser sagrado para su comunidad, sea reconocido por la justicia peruana como un “sujeto con personalidad jurídica” con derecho a «fluir libremente y estar libre de contaminación». Así como la designación a las comunidades indígenas como “guardianas y representantes legales del Marañón y sus afluentes” (Martins, 2015).

Mari Luz, durante 30 años de activismo, ha luchado porque el Estado peruano escuche a los pueblos indígenas y atienda sus diversas demandas sin mayor éxito. Por lo que decidió, en el 2021, junto a sus compañeras, acogiéndose al concepto de derechos de la naturaleza y a su cosmovisión kukama, presentar una denuncia contra diversas entidades estatales como Petroperú, y los Ministerios de Energía y Minas y del Ambiente por los constantes derrames de petróleo que han tenido graves impactos en la salubridad del agua del río Marañón y, por ende, en las diversas aristas de bienestar de la población.

Sobre la importancia del río Marañón para la comunidad Kukama Kukamiria, Canaquiri afirma lo siguiente: “es como un padre, nos da el pescado y el pescado nos da la alimentación, la economía, la salud. Es parte de nuestra vida” . “Para nosotros, el río es un ser vivo, como una persona […] Hay seres vivos que viven en el río” (citada por Martins, 2025) además de mencionar que este es habitado por los espíritus de sus ancestros con los cuales ellos tienen una importante relación de respeto y convivencia (Goldman Environmental Prize, 2025).
Con estas afirmaciones y este triunfo legal, las lideresas kukama demuestran, una vez más, al mundo y al Perú, que los bienes naturales son seres merecedores de respeto, agradecimiento y reciprocidad. Necesitamos de ellos para vivir, y debemos ser conscientes de que estamos interconectados, dentro de un ecosistema que nos hace interdependientes. Debemos dejar de lado el antropocentrismo destructor y “malentendido progreso” que ha regido y aún rige algunos sectores de la sociedad.

En este sentido, el Papa Francisco acotaría que “la defensa de la tierra no tiene otra finalidad que no sea la defensa de la vida […] No podemos disponer de los bienes comunes al ritmo de la avidez y del consumo. Es necesario que existan límites que nos ayuden a preservarnos de todo intento de destrucción masiva del hábitat que nos constituye. [Los humanos] no somos los poseedores absolutos de la creación”.
Es importante que estos hechos y estas palabras nos invitan a cuestionarnos sobre cuál es nuestra propia visión sobre la Amazonía, los bienes naturales y el desarrollo ¿Somos aliados, desde nuestras tribunas, en la defensa de la vida?
El fallo ordenó a la empresa estatal Petroperú y al gobierno regional abordar de inmediato los derrames de petróleo y crear un plan de protección para el río. Para Mari Luz y sus compañeras esta lucha aún no termina, pero este triunfo marca un antes y un después, no solo para la defensa de la Amazonía, sino también haciendo escuchar su voz como mujeres amazónicas.
Finalizo con lo mencionado al inicio de esta nota, no creo que estos sucesos se hayan ubicado en la misma fecha por casualidad, tienen mucho que ver entre sí.

Han sido días difíciles en los que hemos despedido a Panchito, el papa con alma amazónica, el papa de la juventud. Y puede que nos hayamos concentrado de manera especial en él por el impacto que tuvo, en nosotros, su liderazgo, pero seguramente, él también hubiera querido celebrar el logro de Mari Luz y las mujeres defensoras Kukama. Estaría orgulloso, expresaría su admiración y nos llamaría, una vez más, a entablar diálogos interculturales con los pueblos indígenas, y a escuchar a Mari Luz cuando nos pide unirnos a su lucha por cuidar la Madre Tierra.
Así como lo dijo el 19 de enero del 2018, durante su viaje apostólico a Madre de Dios, el primer lugar al que decidió visitar en el Perú: los pueblos indígenas tienen mucho que enseñarnos a quienes no pertenecemos a su cultura. “Quienes no habitamos estas tierras, necesitamos, [con urgencia, nutrirnos] de su sabiduría y conocimiento para poder aprender a relacionarnos con la naturaleza y adentrarnos, sin destruir, el tesoro que encierra esta región”.
El papa finaliza esta parte de su discurso con una frase muy simbólica para los cristianos y que nos demuestra su amor por su querida Amazonía: “se hacen eco las palabras del Señor a Moisés: «Quítate las sandalias, porque el suelo que estás pisando es una tierra santa»” (Ex 3,5, citado por el papa Francisco, 2018).
Mari Luz Canaquiri Murayari, 2025 Premio Medioambiental Goldman
Referencias:
Bayarte, P. (2025). La lucha de la activista indígena peruana por su río amazónico que le ha valido un Goldman. SWI swissinfo.ch https://www.swissinfo.ch/spa/la-lucha-de-la-activista-ind%C3%ADgena-peruana-por-su-r%C3%ADo-amaz%C3%B3nico-que-le-ha-valido-un-goldman/89215692
Cárdenas y Torres (2025). Francisco, un Papa con alma amazónica. Derecho, Ambiente y Recursos Naturales (DAR). https://dar.org.pe/francisco-un-papa-con-alma-amazonica/?fbclid=IwY2xjawJ3ikxleHRuA2FlbQIxMABicmlkETFrYzNadUhscnBHY1k5UzdzAR6zWyMeFWDAGyBZGtuzb7zyW7XvVKiHlEfC_96Zx6pVCSio8pnS_H8YCP-01Q_aem_G_NdVQ72NObwMtpPk_yGZQ
Goldman Environmental Prize (2025). Mari Luz Canaquiri Murayari’s Acceptance Speech, 2025 Goldman Environmental Prize.
https://www.youtube.com/watch?v=xABZUaq09FM
Goldman Environmental Prize (2025). Mari Luz Canaquiri Murayari, 2025 Premio Medioambiental Goldman https://www.youtube.com/watch?v=yZ6D0A0Z3lA
Martins (2025). «Defender los ríos es defender nuestra propia vida»: Mari Luz Canaquiri, la guardiana del río Marañón que logró un fallo histórico en Perú y ganó el «Nobel verde». BBC NEWS MUNDO. https://www.bbc.com/mundo/articles/c0l09n8rz9po#:~:text=Canaquiri%20recibir%C3%A1%20este%20lunes%20en,medidas%20para%20proteger%20nuestro%20planeta%22
Papa Francisco. (2018). Discurso a los pueblos amazónicos en Puerto Maldonado. [Sitio web].https://www.vatican.va/content/francesco/es/speeches/2018/january/documents/papa-francesco_20180119_peru-puertomaldonado-popolazione.html
Papa Francisco. (2025). Esperanza. La Autobiografía. PLAZA & JANES.